Barcelona: Masia la Candela

han desalojado la masia la candela a sant pol de mar.

masia okupada y autogestionada como centro social, despues de esperar que se realizara un procedimiento normal con todos los argumento legales nos expulsan con un desalojo cautelar prescrito del momento que enta en vigor la ley mordaza indica que no existe desalojo cautelar …

asi y todos los argumentos para que se realize un proceso legal no acogen el recurso presentado y se procede al desalojo con una treintena de furgonas de mossos d escuadra y personal antidisturbios ambulancias maquinarias para desde ya ponerse a sacar todo lo que les moleste del bosque y comenzar el negocio de camping miky.

los compañer@s han permanecidos barricados dentro de casa hasta que rompieron muros y puertas expulsando a los okupantes que se resistian al desalojo ilegal …

en estos momento el grupo esta mas fortalecido y de ya comenzamos con un nuevo cso al maresme y les estaremos informando como va la nueva okupacion

como dice el lema un desalojo otra okupacio…

un fuerte abrazo comunidad okupa y resiste a la desidia …

salut y alegria merci a totes

masia la candela

Nafarroa: Aritzkuren bizirik. Apuntes para una historia ecosocial del valle de Artze

En 1987 a propósito de la lucha contra el embalse que se pretendía construir en el valle del Pas (Cantabria) Jesús Ibáñez escribía: “La guerra es de la ciudad contra el campo. Los campesinos son un engorro: pues tienen memoria, resisten. Primero serán eliminados los montañeses, luego los llaneros. Además ¿quién iba a consumir las comidas y bebidas sintéticas de las transnacionales si no fueran eliminados los campesinos y ganaderos? El Avecrem y la Cocacola pueden ser opciones de gourmet: basta que como alternativa sólo queden el fango y el agua de cloaca”. Algún día tendremos que escribir colectivamente la crónica de esta guerra de la ciudad contra el campo, la crónica triste de esta guerra de la modernidad capitalista contra las raíces y las culturas campesinas,… sirva este texto para dar cuenta de una pequeña victoria que podría contener semillas de un mundo mejor.

El valle de Artze en el norte de Nafarroa es unos de esos territorios que en el proceso de modernización agraria del siglo XX quedaron rezagados, desplazados y derrotados. Terrenos montañosos y mal comunicados, suelos pobres, climatología adversa y una población con una identidad muy fuerte y refractaria al cambio… confluyen en un paisaje agreste que a principios del siglo XX aún se mantiene relativamente al margen de los flujos culturales, comerciales y políticos del desarrollo capitalista, y por lo mismo conservan altos grados de soberanía alimentaria y energética y mantienen una rica vida comunitaria que cristaliza en instituciones y prácticas de apoyo mutuo y cooperación social muy eficientes y de larguísima raigambre histórica. [Leer más]