El bloque okupado la Kan Tonada empieza el mes de enero con fecha abierta para el desalojo de una de sus viviendas. Se trata de un bloque que desde hace 3 años construye vida en colectivo en la Sagrada Familia, un barrio donde el aparato turístico se impone con agresividad.
Existen dos procesos de desalojo con fecha abierta. Uno de ellos para una de las viviendas, programado para la segunda quincena de enero; y el segundo, para el bloque entero, pendiente de fecha. Pero existe el riesgo que, con la excusa del desahucio de la primera vivienda, la empresa Tonim S.L, propietaria de todo el edificio, quiera aprovechar el procedimiento y desalojar el bloque entero.
La empresa Tonim S. L. , propiedad de Antoni Vila Casas, quiere rehabilitar el edificio para construir pisos de lujo o turísticos, contribuyendo a reforzar y perpetuar el proceso de gentrificación que vive este barrio y, en general, Barcelona como modelo de ciudad ligado a los intereses del capital económico del turismo.
Pero ¿Quién es Antoni Vila Casas y qué le permite intentar impulsar dos desalojos en uno, sin que la ley así lo establezca?
Antoni Vila Casas se presenta como un “defensor de la cultura catalana contemporánea y de la salud”. Entre sus declaraciones, no consta que forma parte de una de las 200 familias más poderosas del Estado Español, y que sus mayores inversiones son sustentadas por la especulación inmobiliaria, la compra de edificios emblemáticos para dar rendimiento a éstas y el negocio farmacéutico.
Especulación inmobiliaria y evasión
Según la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sobre las compañías que cotizan en la Bolsa española (datos de septiembre 2013), Antonio Vila Casas tiene gran parte de su patrimonio en 5 SICAVs (Sociedades de Inversión de Capital Variable).
Las SICAVs son creadas principalmente para reducir el pago de impuestos (ya que pagan un 1% frente al 25% que pagan las PYMES); también son creadas para proteger el patrimonio familiar de responsabilidades ante reclamaciones judiciales en la gestión de otras empresas.
Estas sociedades tienen la característica que, además de aceptar participaciones en forma de aportación monetaria, también aceptan participaciones en forma de aportación patrimonial, lo que para una familia como la Vila Casas, considerada como un modelo de “family offices”, le permite gozar de privilegios fiscales. Según El diario Economía Digital, Vila Casas tiene un patrimonio de 116,2 millones de euros en sus 5 SICAVs.
Antoni Vila Casas, a pesar de nombrarse como “un ciudadano consecuente y preocupado por la económica catalana”, como cualquier gran empresario, escoge sus inversiones en función de la máxima ganancia y la protección de su patrimonio y riqueza, aunque eso suponga pagar menos impuestos o buscar mecanismos para evadir responsabilidades jurídicas si fuera necesario.
Como parte de esta lógica, Antoni Vila Casas se dedica a la compra-venta de edificios de prestigio como el edificio Majestic (por el que pagó 20 millones de euros a la SAREB, por 28 de sus apartamentos de lujo); y la Torre Agbar (2007-210), donde figura como copropietaria una de las empresas de la que es representante: La sociedad Azurelau S.L.
La compra de inmuebles que son propiedad de la SAREB (Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria) tiene grandes connotaciones en una ciudad como Barcelona ya que, la SAREB, considerado como “banco malo”, ha sido constituido con la intención de “sanear los activos tóxico inmobiliarios” generados por un sistema en crisis permanente, como lo es el del mercado inmobiliario.
La SAREB nace en el marco de la crisis económica mayormente provocada por la especulación inmobiliaria. Se trata de un banco que compra bancos o cajas con problemas económicos de impago de préstamos o riesgos de morosidad como BFA-Bankia, CatalunyaCaixa, Novagalicia Banco y Banco de Valencia. La SAREB recibe mayoritariamente dinero público para la compra de estas entidades o de parte de ellas, en una deuda avalada por el Estado y el Banco Central Europeo (BCE), supuestamente, para “gestionar activos de riesgo”.
Es decir, con dinero publico y bajo la justificación del “saneamiento económico”, se subvenciona un modelo en permanente crisis, generado para que familias como la de Vila Casas puedan acceder a inmuebles que tendrían precios más elevados. Esto se traduce, para la mayoría de personas, en la imposibilidad de acceder a una vivienda y por consecuente, al desahucio y la criminalización de quienes intentan acceder a ella.
El poder judicial contabiliza que en Catalunya se desahucian 43 familias diariamente y, solo en Barcelona, a una media de entre 8-10 familias (cifras del 2016). Según un informe elaborado por la PAH, en solo tres años, los precios de los alquileres en Barcelona han subido un 24% y, en algunos barrios, hasta el 66%.
“Saneamiento” y doble moral
El discurso del “saneamiento” tiene una doble vuelta de tuerca en el caso del empresario Antoni Vila Casas ya que, siendo de profesión farmacéutico, ha hecho ‘gala’ de sus “grandes aportes en la salud”.
En los años 90s, Antoni Vila Casas inventó un fármaco que fusionaba ansiolíticos y antidepresivos llamado Tepazepán, el cual fue el más recetado en España.
Nosotras nos preguntamos: ¿Cuantas de las familias desahuciadas en el 2016 serían parte de las compradoras de este fármaco?
La industria farmacéutica es una de las más nocivas del planeta. Es ampliamente conocido que sus inversiones no solo generan amplios impactos ambientales, sino que también su poder de influencia afecta a tratados de libre comercio, leyes parlamentarias y ajustes presupuestarios.
Además, según un informe del Instituto de Salud Global Barcelona (ISGLOBAL) sobre innovación biomédica y acceso a medicamentos esenciales de marzo de 2016, el sistema de innovación farmacéutica prioriza los intereses comerciales por encima de los sanitarios, puesto que la industria farmacéutica hace prevalecer la rentabilidad económica por encima del acceso a la salud.
Y Antoni Vila Casas, que hace alarde de “dormir tranquilo” porque su formación jesuita le hace acostarse cada día haciéndose un examen de conciencia, invierte en las industrias que más daño provocan: la farmacéutica y el mercado inmobiliario.
La consolidación del imperio empresarial de la familia Vila Casas tiene su ‘broche de oro’ con la constitución de la Fundación Vila Casas en el año 1986. Mediante los privilegios fiscales que permiten este tipo de entidades, Antoni Vila Casas puede realizar donaciones y decidir de forma privada en que tipo de proyectos “culturales y socio-sanitarios” invierte el dinero que podría formar parte de las arcas del Estado.
Ejemplo de ello es como dentro del modelo universitario publico-privado de las universidades ‘publicas’ del Estado español, las fundaciones deciden sobre cátedras e inciden en el plan de estudios de lxs universitarixs a través de aportes económicos que éstas realizan a dichas instituciones educativas. Así, no es de extrañar que Antoni Vila Casas fuera miembro del Consejo Social de la Universidad de Barcelona.
Es fácil encontrar en notas de prensa las donaciones de esculturas u otras “obras de arte” que Antoni Vila Casas ha realizado a la ciudad de Barcelona, como la escultura donada de Jaume Plensa llamada Dell’arte, la cual recibió el ex alcalde Xavier Trías. Es fácil, también, encontrarlo rodeado de autoridades políticas como en fotografías en las que aparece con el ex presidente de la Generalitat, Artur Mas.
Antoni Vila Casas posee vínculos de alto nivel que legitiman su visión de la ciudad de Barcelona y del modelo económico que se pretende consolidar en este territorio. Y no es casual que se le hayan otorgado premios que así lo garantizan como “La Gran Cruz de la Órden del Mérito Civil (1996)”, “La Cruz de Sant Jordi (1999)” y “el Premio Consejo Nacional de la Cultura y las Artes al patrimonio cultural (2009)”.
Corrupción
Además, Antoni Vila Casas figura como parte de las 12 empresas ligadas al negocio de la especulación inmobiliaria. La página web infocif.es lo vincula con: Inmobiliaria Braviol SA, Can Oliver Nuevo SL, Can Framis Invest SL, JV Risk Technologies SL, Newland Desarrollos XXI SL, Hotsun Condal SL, Invest Fontanilles SL, Neptuno 1990 SL, Terranea Diet SL, Blasconta 99 SL, Escuferr 2010 SL y Ruart XXI S.L.
Por si formar parte del negocio de la especulación inmobiliaria no fuera suficiente, existen datos que vinculan a la empresa propietaria de la Kan Tonada, Tonim S. L., con el conocido caso de corrupción política y empresarial llamado Operación Pretoria. Tonim S. L. y la Fundación Vila Casas tienen sus sedes en la misma dirección que Invest Fontanilles S.L., empresa que forma parte del Consejo de Administración de la compañía Webline Invest que, según el diario digital El Confidencial, está vinculado al caso de corrupción mencionado.
Así, el propietario de la Kan Tonada, Antoni Vila Casas, hace gala de “haber tenido suerte”, invisibilizando cuál es el origen de su patrimonio y propiedades, y mediante qué vínculos políticos y económicos, así como trampas legales, ha construido su imperio.
Es por ello que desde la Kan Tonada queremos señalizar a personas como Vila Casas y a un modelo económico especulativo que daña la ciudad, poniendo por encima de la vida de todas los intereses privados de unos cuantos.
Bibliografía
Antoni Vila Casas: mecenes o especulador?
http://www.lavanguardia.com/lacontra/20130102/54358764916/la-contra-antoni-vila-casas.html
https://www.elblogsalmon.com/economia/que-es-un-banco-malo-y-que-fue-del-sareb
http://www.fundaciovilacasas.com/upfiles/noticies_img/files/A25772.pdf
http://www.fundaciovilacasas.com/ca/n/dellarte-de-jaume-plensa-al-22-de-barcelona
Antoni Vila Casas: mecenes o especulador?
http://www.elmundo.es/cronica/2013/12/22/52b45576268e3e12268b456a.html
https://www.elblogsalmon.com/economia/que-es-un-banco-malo-y-que-fue-del-sareb
Kan Tonada https://kantonada.wordpress.com/2017/12/29/kan-tonada-en-riesgo-de-desalojo-por-antoni-vila-casas/
