Madrid: El Gobierno desaloja la Ingobernable aprovechando el estado de alarma

Da igual a quién se lo contemos que la reacción siempre es la misma. WTF. El autoproclamado ‘gobierno del cambio’, ese que dice guiarse por las reivindicaciones de los movimientos sociales, ha consumado un desalojo en tiempos de Coronavirus. Nunca imaginaríamos esta realidad de confinamiento, estado policial y restricción de la mayoría de actividades. Ni tampoco que, en medio de esta situación, nos íbamos a enterar, mientras estábamos paseando al perro, que nos estaban desalojando a hurtadillas. No sabemos si han sido más cobardes, más torpes o más ilusos. Han tenido la cobardía de aprovechar que el centro social está vacío, y las que recuperaron el espacio están siendo responsables quedándose en sus casas, para saltarse su propio confinamiento, dar la patada a la puerta, quitar las pancartas, y cambiar las cerraduras. Han tenido la torpeza de hacerlo destinando recursos y fuerzas de seguridad, en un momento en que nadie va a creer que esto es realmente una actividad esencial. Y, sobre todo, han sido tan ilusos como para pensar que con esto conseguirán acabar con nosotras.

El Ministerio de Justicia, encabezado por Juan Carlos Campo Moreno, nos ha querido hacer creer que este procedimiento formaba parte de aquellos que el Real Decreto del estado de alarma llama «imprescindibles para la protección del interés general”. No se enteran de nada: mientras nosotras destinamos nuestras fuerzas y capacidades en apoyar al personal sanitario imprimiendo mascarillas 3D o apoyando las redes en nuestros barrios, ellos desarticulan un centro social sin siquiera proponer un uso alternativo. O quizás sí: la continuación de los cinco años de abandono y desidia de un edificio en una de las zonas más exclusivas de la capital. Y llaman a esto “interés general” y “prioridad” en tiempos de pandemia. [Leer más]

Navarra: Aritzkuren, 25 años repoblando la esperanza

La “segunda historia de Aritzkuren” se remonta a la acampada por la Insumisión Total (Insumisioa Osoa) que se celebra en Ondarru (Bizkaia) en agosto de 1994. En aquellas jornadas coinciden miembros del Centro Social Minuesa de Madrid, desalojado cuatro meses antes, junto con gentes que habían estado en el gaztetxe Lore Etxea de Iruñea. De ese encuentro fértil, se pasa rápidamente a buscar un lugar en el mundo.

El pasado 8 de abril se cumplieron los primeros 25 años de la segunda historia de Aritzkuren. Entonces era un pequeño pueblo en ruinas situado en las laderas del pico Araxamedi de la sierra de Zarikieta, en el valle de Artze, con apenas 4 ó 5 caseríos y una iglesia. De la primera historia tenemos documentada su existencia ya en el siglo XIV, alcanzando su máximo de población —en torno a 40 almas— entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Como en tantos otros pueblos del Prepirineo, sus habitantes habían logrado un alto grado de soberanía alimentaria y energética. Una mezcla de actividades ganaderas y forestales, combinadas con la agricultura de autoabastecimiento (cereal, huerta, viña y algunas frutas) se abrió paso entre terrenos escarpados y mucha pendiente, y constituyó la base de su economía campesina. [Leer más]

Madrid: El Gobierno quiere desalojar La Ingobernable en 24 horas pese al estado de alarma

Este martes 14 de abril nos enteramos vía publicación en el BOE de que el Ministerio de Justicia nos daba 48 horas para abandonar el nuevo espacio abierto y recuperado por la Ingobernable en la Calle Alberto Bosch, 4.

El plazo se cumple hoy. Y estamos no solo ante una nueva demostración de la absoluta falta de interés en el diálogo de este Ministerio y del ministro Juan Carlos Campo, sino ante un particular uso del derecho de una administración que ha decidido que su prioridad en plena cuarentena es reanudar un proceso como es el desalojo de la Ingobernable, omitiendo incluso el derecho de alegación, todo para privar a Madrid de un espacio autogestionado. En este caso, son varias las razones por las que nos parece un movimiento particularmente rastrero.

En primer lugar, no podemos comprender ni remotamente cómo este Gobierno ha fijado como prioridad en el actual contexto la reanudación del proceso administrativo para el desalojo de este centro social. Un lugar que, como ya defendimos en nuestro anterior comunicado , será imprescindible, al igual que el resto de centros sociales, para el escenario post-confinamiento. [Leer más]

Madrid: Imagina No Tener Centros Sociales

La semana pasada, en medio de todo el revuelo causado por la presente crisis sanitaria, recibimos con estupefacción la publicación en el BOE de la reanudación del proceso administrativo para desalojar el nuevo centro social de la calle Alberto Bosch, 4. Pese a que el pasado 14 de marzo, con el Real Decreto del Covid19 todos los procedimientos administrativos, incluyendo el nuestro, quedaban paralizados, el Ministerio de Justicia ha decidido reanudarlo alegando «motivos de salud pública”. Como hemos hecho público, nuestra actividad en el edificio está en pausa desde la declaración del estado de alarma, siguiendo las recomendaciones y restricciones implementadas para frenar la epidemia. Evidentemente, concluimos por ello que las prisas por reanudar el procedimiento de desalojo atienden a una voluntad política. Aprovechando el estado de excepcionalidad que nos impide defendernos, se pretende consumar una nueva agresión a los centros sociales autogestionados y privar a la ciudad de Madrid de un espacio esencial para los movimientos sociales.

Esta situación nos ha hecho hacernos algunas preguntas: ¿qué rol tendremos los centros sociales en la etapa venidera? ¿Es realmente relevante, en medio de esta gigantesca crisis sistémica, que desaparezca un espacio como la nueva sede de la Ingobernable? ¿Nos imaginamos un Madrid sin centros sociales? [Leer más]

Berlín: “Ocuparemos…

…hasta que no tengamos que hacerlo más“, solíamos escribir. A menudo hemos ocupado casas en Berlín, muchas han sido evacuadas de nuevo. Pero ahora la situación es diferente. En tiempos de „crisis“, esta frase puede extenderse a un llamamiento: „¡Tenéis que uniros – en toda Europa!“

Covid-19 se está extendiendo por más y más áreas del mundo y resulta que el así llamado estado de catastrofe es la regla. Porque allí, donde la gente es llamada por el supuestamente necesario y estricto estado paterno: „Quédate en casa“, no todo el mundo tiene hogar. Como si eso no fuera suficiente, el propio estado ha aumentado el número de personas sin hogar desalojándolas. Al mismo tiempo está cerrando los alojarmiento precarios, que les desamparades necesitan para un poco de pan, agua y jabón. En su doble moral, nos exhorta patriarcalmente: „¡Cuidado con la higiene!“

„¡Evitar el contacto social!“ es lo que los gobiernos nos piden que hagamos. Pero, ¿hacia dónde deberían retirarse les refugiades cuando están hacinados en campos y prisiones de deportación en las fronteras exteriores de Europa y en la periferia alemana? Al lado de quitarles sus derechos humanos – como el asilo, la libertad de movimiento y la vivienda – también se han visto privades de la posibilidad de protegerse eficazmente contra Covid-19. [Leer más]

Atenas: Maderos dentro la Universidad de Económicas. La okupa de Vancouver se reocupó simbólicamente

Todo empezó el lunes 24 de febrero, dentro de los terrenos de la Universidad de Económicas de Atenas, cuando un madero de paisano fuera de servicio se bajó de su moto y empezó a acosar a un vendedor callejero migrante fuera de la puerta principal. El policía fue visto por estudiantes anarquistas e identificado debido a sus botas y a su casco, que llevaba la insignia policial, y fue inmediatamente confrontado. Movido por el pánico, empezó a correr al interior de los terrenos de la universidad y él mismo quedó atrapado en un callejón sin salida, así que sacó su pistola y con el dedo en el gatillo apuntó a les estudiantes y amenazó con dispararles mientras les encañonaba durante al menos 5 minutos, mientras llamaba desesperado a sus colegas por el comunicador para que fueran a rescatarle. Les estudiantes, sin perder la calma pero al mismo tiempo sin dar ni un paso atrás, le exigieron que bajase el arma y que saliese de los terrenos universitarios. Pocos minutos más tarde destacamentos de maderos antidisturbios asaltaron la universidad y atacaron a les estudiantes (durante horario lectivo) con granadas de choque y gases asfixiantes, creando el caos porque un madero imbécil se creyó que era un cowboy. [Leer más]

Madrid: La Ingobernable, seguimos en el corazón de Madrid

Para nuestras amigas.
Para las que luchan cada día.
Para las que ya no están.
En este mes de revuelta feminista, de rabia organizada, de alegría y de lucha, las vecinas de Madrid hacemos pública la recuperación del edificio de la calle Alberto Bosch 4, como un nuevo espacio común y abierto en el corazón de Madrid. Llevamos días dentro de este espacio esperando anunciarlo a la ciudad de Madrid: la ingo ha vuelto. Ahora, en esta semana más que nunca, debemos recordar el papel que han tenido, tienen y tendrán los centros sociales para el movimiento feminista, como espacio de convergencia, construcción y autoorganización. El ataque a los centros sociales es, indudablemente, un ataque directo al feminismo, que no estamos dispuestas a tolerar.
Venimos asistiendo en los últimos años a un lamentable espectáculo en el que unos pocos se reparten la ciudad, vendiéndola al mejor postor o entregándosela a amiguetes mientras a otras nos echan de nuestros barrios. Hace poco nos enteramos de que el edificio de la Ingobernable (Paseo del Prado 30) volvía a regalarse, al estilo corruPPto y ya habitual del PP, a una fundación dirigida por el ex-alcalde Gallardón para construir un museo en vez de las tan prometidas dotaciones para el barrio que en campaña electoral propugnaba el actual alcalde, Martínez-Almeida. Esta historia nos suena mucho porque hace algunos años la también ex-alcaldesa Botella ya lo regaló, por 1 euro y a 75 años, a una fundación amiga del PP. [Leer más]

Madrid: La Ingobernable vuelve a ocupar un edificio en el centro

El colectivo de La Ingobernable recupera un nuevo espacio para continuar con la labor social y vecinal que realizaban en el edificio de la calle Gobernador.

Tras la manifestación convocada hoy, miércoles 4, y que arrancaba esta tarde frente al edificio de la Bolsa de Madrid, el colectivo de La Ingobernable ha hecho pública la recuperación de un espacio, en el que lleva días trabajando dentro, en la calle Alberto Bosch para los movimientos sociales de Madrid y que servirá, según han explicado a El Salto, para albergar acciones del movimiento feminista durante esta semana que culmina en el 8M y, posteriormente, continuar la labor social y vecinal que realizaba el edificio desalojado.

El edificio, propiedad del Estado, lleva vacío “más de cinco años, privando a las vecinas y a movimientos sociales, como el feminista, de un bien común que debería pertenecerles”, han declarado a El Salto fuentes de la asamblea de La Ingobernable. En junio de 2016 se publicó un contrato menor de servicios por valor de 900 euros y concepto de Inspección técnica del edificio. En él constaba como órgano de contratación la Subsecretaría del Ministerio de Justicia, lo que indica que dicha cartera se hacía responsable de la propiedad del edificio, aunque el edificio se cediera durante un tiempo a la Comunidad de Madrid para albergar el Archivo Histórico de Protocolos, ya trasladado. [Leer más]

Porto (Portugal): Llamada internacional a la acción

ABRIL EN ACCIÓN
Porto, Portugal 2020

Esta llamada nace de la negativa a conformarse y permanecer pasivamente observando cómo los Estados y los gobiernos convierten el mundo en una máquina de opresión impuesta por los gobernantes que ni siquiera ocultan la falta de respeto que tienen hacia poblaciones enteras.
Hemos sido testigos de una escalada de eventos que exigen repensar nuestra postura en el mundo y la forma en que queremos liderar nuestras vidas y el futuro del planeta.
Salarios bajos, alquileres irrazonables, gentrificación que empuja a las clases más bajas fuera de las ciudades, fuera de sus comunidades locales para darles espacio a los ricos, no solo alejándolos de sus raíces e historia, sino también sin proporcionar recursos alternativos para una vida digna. Una consecuencia de la especulación inmobiliaria y solo en beneficio de la clase alta y los intereses económicos capitalistas. La explotación de recursos como Shale Gas y Lithium sin respetar la voluntad y el bienestar de los ciudadanos que viven cerca. Sistemas de peaje ilegales. Nuevas construcciones que destruyen ecosistemas enteros, como el proyecto de un nuevo aeropuerto en Montijo, o plataformas de extracción de fracking que contaminan las capas del suelo y contaminan las placas de agua (el mismo agua contaminada que entra en las casas de los ciudadanos cercanos). [Leer más]

Rubí (Cataluña): Concentración contra el riesgo de desalojo del huerto comunitario El Mirlo

Communicado del Hort Comunitari El Mirlo
¡Si el especulador persiste, el Mirlo resiste!

Sábado 15 de febrero de 2020, 12:00, concentración frente a la estación de trenes de Rubí.

En Mayo de 2016 okupamos el terreno de la calle General Prim 44, enfrente del Ateneo Anarquista la Hidra, propiedad en aquel momento de Arrels CT Finsol, inmobiliaria del BBVA, con el fin de construir entre todxs un huerto comunitario. Desde entonces le damos vida a este espacio, dando uso a una tierra abandonada. El Mirlo y sus plantas no han parado de crecer con el esfuerzo de todxs, día tras día y en cada una de las jornadas abiertas a lxs vecinxs que se organizan cada 15 días. Cultivamos hortalizas, plantas medicinales, tubérculos y lo hacemos entre todxs para aprender conjuntamente y así compartir conocimientos. El huerto también es un espacio de encuentro para personas y colectivos, un rincón resguardado de la asfixiante de la contaminación y el asfalto de esta ciudad. [Leer más]