El amanecer del miércoles 18 de diciembre del 2020 el Estado, en un crescendo de represión y siguiendo fielmente la doctrina de «Ley y Orden», desalojó las tres casas de la Comunidad de Okupas del barrio Koukaki. Esa mañana nuestros barrios se llenaron de cada tipo de policía, antimotines, agentes de los Grupos de Prevención y Represión de la Delicuenncia (OPKE) y de la Unidad Especial Represiva y Antiterrorista (EKAM) que no sólo parecían a un ejército de ocupación sino actuaron como tal.
Bloquearon las calles alrededor de las casas okupadas, impidieron a lxs vecinxs moverse libremente, lanzaron granadas aturdidoras en un barrio residencial densamente poblado, provocando terror a lxs niñxs que en estos momentos iban a la escuela. Pidieron las identificaciones a la gente solidaria que llegaba, detuvieron cinco compañerxs sin ninguna justificación y nunca dejaron a lxs demás acercarse a las casas okupas. [Leer más]