Para muchas personas, las condiciones de vida en Grecia son dramáticas: una alta tasa de desempleo, recortes sociales en masa, recortes en las pensiones, desalojos y la privatización de gran cantidad de infraestructuras. El sistema social y sanitario se ha estrellado, mucha gente no puede permitirse la comida y, menos importante, medicinas.
Muchos centros sociales y viviendas, que llevaban abandonados mucho tiempo, han sido okupados durante unos 20 años. Durante la crisis, se han convertido en un importante punto de encuentro para muchas personas. La gente se ayuda con tiendas gratis, cocinas colectivas y, en ocasiones, espacios para dormir. Desde estas casas, siempre han surgido acciones por un mundo libre y solidario. [Leer más]